Crónica de Jordi Viñals y Das
Este fin de semana Das nos ha hecho dar la sorpresa, así que esta vez nos toca la crónica a nosotros y … buf! Después de los resultados conseguidos me pasan millones de cosas por la cabeza: me emociona recordar el día que Das apareció en mi vida, pasando por el hecho de que casualmente ha resultado ser un crack en esto del canicross (aunque nadie lo adoptó para practicarlo -no sabíamos ni qué era), y llegando al día en que hemos conseguido subir a un podio oficial, pasando por delante de personas que admiramos enormemente y junto a auténticos referentes para nosotros.
Pero no se trata de que nos abandonéis antes del segundo párrafo así que vamos al lio y empecemos por el principio! Todo empieza el viernes subiendo hacia Sort para pasar la noche y así no tener que llegar con las prisas y los nervios de otras veces que hemos tenido que ir a última hora. Y como el sábado no corríamos hasta la tarde … pudimos hacer el perro levantándonos un poco tarde sin prisas.
Apretaremos el botón de rebobinar y nos saltaremos las horas de espera hasta llegar a los instantes previos al inicio de la etapa del sábado. La impaciencia por salir crecía a cada momento y que retrasaran la salida media hora aún contribuyó más a ello: hacía frío (-8ºC? -9ºC? -10ºC?), ya era oscuro… probamos por primera vez los cordones para correr sobre nieve (un tipo de cadenas para las zapatillas), calentamos y vamos hacia la salida!
Como ya es habitual, Das está como una cabra antes de salir. Sabe qué toca y se pone nerviosísimo tirando para adelante. Pero hoy nos toca salir de los últimos en la categoría canicross senior (salimos de uno en uno, cada 30 segundos), así que nos dejamos los brazos aguantándolo y… ahora sí! “5, 4, 3, 2, 1”: nos dan salida, “Hike! Hike! Hike Das!!! “.
Das hace una salida muy buena y más adelante vemos la poca luz que sale del frontal de David, que ha salido delante de nosotros. Vamos a por él! En un circuito con un total de 4,2km -mitad de subida y la otra de bajada- y con un desnivel de casi 300 metros, empezamos a ascender por la subida todo acercándonos cada vez más a él. Miro atrás, hoy Teixi sale detrás nuestro y sabemos de lo mucho que son capaces él y Kylie. Parece, sin embargo, que de momento sigue bastante lejos, así que volvemos a centrarnos en atrapar a David hasta que lo conseguimos.
A partir de ahí, todo un reto ante nosotros: Das no es bueno corriendo sin referencias delante y al pasar a David, la siguiente persona que tenemos más cerca ha salido un minuto y medio antes que nosotros (Xavi estaba inscrito pero ha acabado haciendo “sólo” skijoring con SúperBuk, así que ha dejado un hueco en la parrilla de salida), así que la segunda mitad de la subida, la que se hace más pesada, la hacemos con Das distrayéndose, yendo de un lado a otro de vez en cuando, y tirando en dirección a los otros corredores cuando los ve bajar al último tramo de subida en vez de tirar hacia arriba (no había ninguna barrera visual entre la subida y la bajada, que estaban en la misma pista separadas sólo por unos postes indicativos).
No aflojamos, pero, sé que unos segundos de relajación pueden acabar condicionando mucho el resultado final y llegamos a la curva que nos permite empezar a bajar: allí Das de entrada se distrae comiendo nieve hasta que empieza a dar todo lo que él sabe, arrastrándome a un ritmo frenético mientras yo lo sigo desequilibrándome y hundiéndome en la nieve… brutal!
Mientras hacíamos la subida sólo pensaba en que llegara de una vez la bajada, pero la bajada se me hizo mucho, mucho más dura. Tantísimos metros a sprint fueron una burrada. Por otra parte, cada vez que notábamos que David volvía a atraparnos teníamos que apretar más para dejar de notarlo en nuestro nuca; no queríamos hechar a perder todo el esfuerzo realizado en la subida para pasarlo.
Seguimos a un gran ritmo hasta la recta final y aquí David y Six vuelven a enseñarnos las garras: por poco no nos pasan antes de cruzar la línea de meta, pero lo damos todo para que eso no ocurra y lo conseguimos!
Después de la carrera nos vamos a cenar y a descansar para el día siguiente, pensando que la de hoy ha sido una carrera divertida, pero al fin y al cabo una carrera más en la que Das ha tenido momentos de estar muy conectado y otros un poco disperso, y tenemos claro quien optará a luchar para acabar de definir las posiciones de podio al día siguiente. Pero, de repente, nos pasan las clasificaciones y… sorpresa con mayúsculas! Vamos cuartos, de forma absolutamente inesperada, a sólo 6 segundos de la 3ª posición, por detrás de Javi (1º), Sergi (2º) y Teixidor (3º).
Viéndome tan cerca del podio pienso que mañana será demasiado difícil conseguir un resultado mejor de lo conseguido, sobre todo teniendo en cuenta ante qué “rivales” nos encontramos. Pero justo antes de acostarnos cambio el chip: “Marta, sé que será durísimo, pero a partir de este momento me olvido de esta parte. A partir de este momento voy a por todas, mañana vamos a por el podio!”
Nos plantamos ya el momento decisivo: domingo, ocho y pico de la mañana, sigue haciendo mucho frío pero estamos motivadísimos! Las salidas vuelven a ser como el día anterior (de uno en uno y cada 30 segundos) y en función de la posición en la que quedamos. Por lo tanto, salimos cuartos detrás de Teixidor y Kylie (esto quiere decir que si los atrapamos, aunque sea un poco, y no atraviesan la línea de meta más de unos aprox. 23 segundos antes que nosotros, habremos conseguido nuestro objetivo).
Una vez ellos han salido, comienzo a decirle a Das, para motivarle mientras lo aguanto: “mira la Kylie, Das! Mírala! ” (Das está súper enamorado de ella desde que compartieron el viaje a los Alpes este verano) y él no le quita ojo de encima mientras también se gira como preguntándome “pero ya o no!!??”. Entonces nos dan salida y salimos como una flecha hacia nuestros objetivos. Parece que conseguimos recortarles unos cuantos segundos y nos mantenemos durante toda la subida a una distancia muy buena. Si seguimos así, pienso, estamos en posiciones de podio y aún queda la bajada, a ver si conseguimos atraparlos!
Al comenzar esta, Teixi se escapa como una bala. No nos pondrá las cosas nada fáciles, tendremos que darlo todo y más. La distancia a la que lo manteníamos en la subida, al principio de la bajada ha aumentado un poco y, de repente, flaaaaaaasssssss!!! Aparece un trineo con 8 perros desde la izquierda (sólo compartíamos parte del circuito con los trineos) que se coloca entre nosotros y Teixi y Kylie. En este momento me cago, hemos perdido el contacto visual con ellos y pienso que ahora Das se asustará y no podremos atraparlos. Pero más adelante volvemos a atraparlos y vemos que Teixi habrá tenido algún tipo de problema con el trineo. El músher termina parando el trineo y nosotros lo pasamos por el lado mientras Das afloja impactado por la larga hilera de perros.
Seguimos adelante, volvemos a tenerlos a una muy buena distancia y estamos yendo a un ritmo impresionante. Mucho más que el del día anterior. Por momentos sufro por mi cuerpo y todo, todavía no está preparado para estas velocidades. Llegamos a una curva casi circular que enlaza con otra pista, ya queda muy poco y Teixi aprovecha la curva para mirar atrás y ver cuánto nos quita. En ese momento se que se ha dado cuenta de que nos tiene demasiado cerca y que lo dará todo para que no le robemos la plaza en el podio, y así lo hace. Yo echo de cabeza a falta de piernas y, con la ayuda de Das, conseguimos que no nos arañe mucho segundos más.
Y una vez más, llegamos a la recta final. Estoy muy hecho mierda y los segundos que nos separan de la línea de meta se me hacen eternos. Veo que Teixi atraviesa la línea y empieza la cuenta atrás; si pasan más de 23 segundos desde ese momento hasta que yo la traspase no habremos conseguido nuestro objetivo. Y entonces tengo esa sensación de cuando los médicos te hacen hacer la cuenta atrás mientras duermes antes de una operación (o al menos así nos lo venden en la tv): intento contar los segundos que están pasando, mientras sólo siento el ruido del mi corazón y prácticamente pierdo el mundo de vista… acabamos cruzando la meta hechos una auténtica mierda y con la sensación de haberlo conseguido.
Más tarde, cuando salen las clasificaciones, volvemos a quedar atónitos. Lo hemos conseguido! Terceros!!! Hemos hecho el mismo circuito en, prácticamente, dos minutos menos que el sábado y, además, hemos acabado quedando a sólo 6 segundos de la segunda posición de Sergi, con quien ni nos fijábamos porque lo veíamos absolutamente inalcanzable. Brutal. Das, lo has conseguido!!!
Así pues, terminamos subiendo al tercer cajón del podio junto a dos enormes cracks como Javi y Sergi, mientras que en el resto de categorías todos y todas las integrantes de Gosesport completaban un enorme palmarés para el club. Por otra parte, muy buen papel también de aquellos que quedaban fuera de las posiciones de mérito. Estáis trabajando súper bien y por eso sois un gran ejemplo para mí. Muchísimos ánimos que os merecíais tanto o más que yo mi posición final.
Y, como no, mención especial a Teixi (eres un crack, uno de los clarísimos referentes para mí de entre un cúmulo de grandes personas que he conocido practicando canicross, y esto hace que conseguir terminar sobrepasándote este fin de semana tuviera un valor especial para mí) y, sobre todo, a Marta: sin tu ayuda día a día no habría conseguido este resultado y no encararía con la motivación que encaro ahora la temporada que tenemos por delante. Gracias infinitas a ti y a todos y todas aquellas que me animan tanto cuando las cosas van bien como cuando se tuercen!
Una vez hecha la crónica del fin de semana, quería aprovechar que hoy tengo este canal para, antes de cerrar, hacer una reflexión a título personal sobre una serie de elementos que nos afectan a aquellos y aquellas que practicamos y amamos este deporte y que queremos verlo crecer y mejorar.
Me parecen absolutamente injustas, innecesarias e inoportunas medidas como las de que el límite de carreras oficiales a disputar sea de sólo 3 para aquellas personas que no estén federadas (sin entrar en más debate aquí, puedo entender la lógica con la que se toma esta medida, pero no comparto en absoluto una manera de aplicarla que sólo puede contribuir al desencanto de la gente). Cuando, además, esta particular forma de fomentar que la gente se federe, va acompañada de un seguro por accidentes que, inexplicablemente, nos deja absolutamente desprotegidos (son múltiples los casos de deportistas del club al que nos ha dejado tirados a pesar de sufrir lesiones causadas como resultado de la práctica del canicross), y a pesar de haberse encarecido, la licencia federativa, más de un 25% en los últimos dos años, el tema aún preocupa más.
Quizá resulta que tenemos más cosas que decir de las que hemos dicho, al menos en el período que yo he vivido haciendo canicross, y más capacidad de aportar de la que se nos ha permitido hasta el día de hoy. Al fin y al cabo, nosotros somos los que conformamos este deporte y sin nosotros, por tanto, éste no existiría.
Nada más, nos vemos este domingo en Terrassa en la segunda carrera Gosesport y tercera de la Liga Catalana! A recuperar fuerzas y a seguir disfrutándolo muchísimo!
